Campaña por Merovingian: capítulo III (desenlace)

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Campaña por Merovingian: capítulo III (desenlace)

La defensa por la capital Regalis Prime

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Ni siquiera el Gran Maestre Aun de los Ángeles Oscuros era capaz de imaginarse la arrolladora marabunta que se les iba a echar encima en los muelles de Regalis Prime. Como un gran Tsunami, miles de tiránidos colapsaron las defensas de los marines espaciales, impotentes pese a su testaruda fe en el Emperador y su tecnología. Las garras y mandíbulas del enjambre Cronos destrozaban las servoarmaduras a placer, y uno tras otro los defensores fueron obligados a retroceder a los callejones de la barriada de la capital del planeta. Las pocas bajas que lograban causar los adeptus astartes no hicieron mella alguna en el embate de los tiránidos. Una vez tocada tierra, los grandes organismos xenos se dispersaron por los principales conductos acuáticos de la colmena, infestando cada lugar posible de Regalis Prime con su pútrida presencia. (más…)

Campaña por Merovingian: capítulo III (parte II)

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Capítulo III: Parte I /


Capítulo III: la sombra de un traidor

La defensa por la capital Regalis Prime

Con la apertura de la fisura disforme en Arntor los portales de la telaraña ocultos en el sistema se revelaron: luces danzantes en oscuros callejones, altas cimas montañosas y dentro de almacenes abandonados. Un tentador trofeo para todos aquellos dispuestos a viajar rápidamente entre los diferentes planetas. Muchos ciudadanos imperiales intentaron atravesar las puertas de la telaraña en busca de un futuro mejor, aventurándose a ciegas en territorio rara vez visto por los ojos del hombre. La nueva información no tardó en llegar a los oídos de las fuerzas defensoras, que tuvieron que movilizarse para protegerse de ese nuevo frente. Ya no solamente las amenazas venían del espacio, donde los cañones orbitales podían repeler parte del enemigo; con estas entradas desveladas, tanto los Drukhari como los caóticos podrían atacar el corazón de las mayores colmenas de Regalis Major.

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Campaña por Merovingian: capítulo III (parte I)

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Capítulo I: Parte I / Parte II / Desenlace

Capítulo II: Parte I / Parte II / Desenlace


Capítulo III: la sombra de un traidor.

Las cabezas de todos los habitantes de Anduak, de los combatientes y de cualquier criatura que estuviese sobreviviendo en los planetas del sistema en guerra, se alzaron al unísono boquiabiertos al observar los dos haces de luz que desprendían Valfar y Arntor. Lamentablemente ninguno de ellos emanaba esperanza, pues la destrucción parcial de la joya de Anduak, de sus prístinas playas, frondosas selvas y complejos turísticos de lujo auguraba un destino fatal al resto de planetas. Por otro lado, Arntor se alzó como un foco de maldad y vileza, atrayendo a todas las abominaciones empíreas posibles a través del gran portal abierto por los Malditos de Kurgan. Akhronax y sus seguidores festejaron con orgullo su victoria al establecer la cabeza de playa en el planeta penitenciario, centrándose nuevamente en conseguir el propósito que les había llevado tan lejos del Ojo del Terror. Akhronax sabía que sus éxitos eran observados por los dioses oscuros, y si continuaba haciendo estas gestas podría ser recompensado como él se merecía. Apenas pasaron unos tensos momentos después de la apertura del portal a la disformidad cuando los presos se lamentaron de su desesperada alianza con los herejes, ya que los demonios no diferenciaban entre ellos y los combatientes leales al Emperador; todos eran una presa. Y si no tenían la suerte de ser masacrados instantáneamente, su sentencia era el sufrimiento a través de la diversión de estas criaturas del caos.

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